¿Qué son los COV? Fuentes y peligros de COV
VOC es la abreviatura en inglés de compuesto orgánico volátil (VOC). Los COV incluyen principalmente sustancias como alcanos, olefinas, aromáticos, aldehídos o cetonas, que provocan una especial irritación por el olor. Algunos han sido catalogados como cancerígenos, como el cloruro de vinilo, el benceno, los hidrocarburos aromáticos policíclicos, etc. Algunos COV también tienen efectos destructivos sobre la capa de ozono, como los clorofluorocarbonos y los hidroclorofluorocarbonos.
Las principales fuentes de COV son las siguientes:
(1) Disolventes orgánicos: como pinturas, revestimientos a base de agua, adhesivos, cosméticos, detergentes, adhesivos para costuras, etc.
(2) Materiales de construcción: como paneles a base de madera, materiales de aislamiento térmico de espuma, placas de plástico, etc.;
(3) Materiales de decoración de interiores: como papel tapiz, otras decoraciones, etc.;
(4) Materiales de fibra: como alfombras, tapices y cortinas de fibras químicas;
(5) Suministros de oficina: como tinta, fotocopiadora, impresora, etc.;
(6) Diseño y uso inadecuados de los sistemas de ventilación, etc.;
(7) Quema incompleta de combustibles domésticos y hojas de tabaco;
(8) Excrementos humanos;
(9) Gases de escape industriales, gases de escape de automóviles, humo fotoquímico, etc. procedentes del exterior.
Los COV son uno de los contaminantes del aire comunes en entornos no industriales. Más de 20 de ellos son carcinógenos o mutágenos. Debido a su baja concentración pero a su diversidad de tipos, se les conoce colectivamente como COV, donde los TVOC representan su cantidad total (es decir, compuestos orgánicos volátiles totales). Cuando la concentración de TVOC es demasiado alta, es fácil provocar una intoxicación aguda. En casos leves, pueden producirse dolor de cabeza, mareos, tos, náuseas y vómitos; En casos graves, puede producirse una intoxicación hepática e incluso un coma rápidamente. Algunos incluso pueden poner en peligro la vida. Según investigaciones médicas extranjeras, las mujeres embarazadas que viven en entornos COV tienen una probabilidad mucho mayor de causar malformaciones fetales que la población general y pueden tener un impacto en el futuro desarrollo intelectual de sus hijos.